abril 29, 2011

Bad Bromance




Quiero que se siente hombre, le tengo que contar algo…

Son dos secretos grandísimos, se los he intentado contar desde que tengo 15 años, pero adivine qué? En ese entonces ni siquiera yo me los creía, es más, ni siquiera creía que llegaría al punto en el que me sentiría tan cómodo conmigo mismo.

Juan, soy gay… y en el tiempo en que estudiamos juntos, me tragué de usted.

No sé si decirle que se olvide de la segunda parte, el hecho de que usted deje de mirarme con los ojos de amigo como lo ha hecho durante los últimos 15 años me tortura un poco. No se lo dije hasta ahora porque tengo miedo de  que una de las personas que más me conoce simplemente decida abrir una brecha y quizá botarme dentro… Igual nada que hacer Juanito, me gusta ser lo que soy, a pesar que aún tengo mucho miedo, nunca en toda mi vida me había sentido tan bien conmigo mismo como lo estoy ahora.

En fin… todo pasó cuando empezamos a estudiar en décimo, no sé si el hecho que usted fuera la primera persona que no le importara cuan afeminado era, yo valía para usted… eso fue incontable, y no sabe todo el bien que me hizo… hombre, eso es algo que nunca le voy a terminar de agradecer, aunque en el proceso pues, bueno, me haya fijado en usted más que como un amigo.

No entiendo como no se dio cuenta, usted es demasiado ingenuo supongo y todas las señales que le dí las interpretó como puro bromance, lo cual fue así oficialmente, y bueno, yo estaba tan asustado de lo que estaba pasando conmigo que asumí que tener un bromance con mi mejor amigo era mejor que no tenerlo en mi vida. Viera el trago amargo que pasé cada vez que usted se rumbeaba a su novia en la sala de mi casa, pero hice de tripas corazón y como buen amigo me dije “bueno, con tal de que él sea felíz, yo me quedo callado”. Eso si no le niego hombre que sí que gocé espantándole cuanta vagabunda con hormonas en recreo se le intentaba meter en los calzoncillos … así como cuando me dejó pasar al teléfono para hacerme pasar por usted y portarme como un guache con la treceañera que lo invitaba a bailar los martes, se acuerda? Ahí tiene, la nena a los dos años se dejó hacer la curvita de la felicidad… usted podía haber sido el papá de esa creatura!

(Lo único bueno que tenía esa nena era el hermano gemelo, que estaba putamente sexy para tener 13 años).

El caso es, mi querido Juan, que usted me tuvo en una traga maluca por un buen tiempo, creo que ni siquiera sabe que casi me echan de la universidad en primer semestre por no estudiar los fines de semana con tal de verlo a sumercé. Ahora recuerda esa vez que le hicimos su pasta favorita en casa de Erica para despedirlo antes que se fuera a cruzar el charco? Tenaz que a uno la traga le deje el almuerzo servido, no? Pero bueno, ambos sabemos que el karma es una perra y usted pasó dos veces por las que me hizo pasar a mi, asi que creo que el balance kármico ya se estabilizó, no? Sumercé era un hijueputica, pero bueno, es mi amigo y aún así, lo quiero resto hombre.

Usted finalmente se fue a cumplir sus sueños y creo que eso me facilitó la vida de ahí en adelante, a pesar que todavía estuve tragado de usted por otros cuatro años. No se imagina lo que rogué para que ese viaje le produjera una epifanía y finalmente se diera cuenta que yo era la persona de su vida (aunque ese abrazo en el garaje de su casa con lagrimita y todo diciéndome la falta que le hice durante dos años estuvo bastante cerca). No llegué a perder las esperanzas del todo cuando estábamos en la finca de Cris y usted sugirió que nos podíamos acomodar en la misma cama, pero ni modo, esa noche me apreté las guevas duro para decir que no, que tal si le daba por dormir en cucharita conmigo y usted se diera cuenta que lo duro que había entre mis pantalones no era precisamente una pistola?

Sucedió que usted se metió en una onda cristiana y se casó muy joven, no sé con qué propósito, pero lo cierto es que cuando recibí la noticia sentí como si me hubieran amputado un brazo. No le niego que el totazo fue durísimo, pero que cree? Yo no olvido, pero sí supero, y desde ese momento, usted se me esfumó y yo volví a estar tranquilo.

El día en que su papá murió comprendí que hice bien en nunca compartir ni mi saliva ni mi semen con usted, porque el destino quería que nos comportáramos como si lleváramos la misma sangre. Me volvió el alma al cuerpo, porque aunque había perdido un amigo hacía algunos años, ese día la vida me regaló lo que por años le eché en cara al destino: Un hermano.

Es por eso que usted me parece un patético, un ridículo, que su sentido del humor apesta y que su culo no es ni la sombra de lo que era en el colegio, y aunque se le vean sexy esos pelitos saliéndose de su traje de cirugía, usted es mi hermano y donde quiera que vaya usted será mi casa, así como yo seré la suya.

Hasta el final Juan, un abrazo!

P.D: Erica cree que usted es homosexual, porque según ella, besa terrible.


abril 23, 2011

Al diablo con los noviazgos virtuales! (Quiérase un poquito!)


Una madrugada, después de terminar mi primera entrada sobre las redes sociales gay, recordé que en el tintero se me quedaron dos consejos importantes: Uno: Preferiblemente buscar contactos dentro de un radio de 10 kms a la redonda y Dos: Nunca prolongar mucho el tiempo para conocer a alguien con quien haya química. No entendía como había olvidado esos dos puntos tan importantes, siendo que ambos los había aprendido a las malas.

Wilson, uno de mis mejores amigos, ya me lo había advertido: Él había tenido una relación años atrás con una dominicana 14 años mayor que él, a quien conoció una noche en una sesión de Latinchat. Empezaron teniendo una bonita amistad que al paso de los meses pasó a ser algo más serio, y en cuestión de un año Ella vino a Colombia, se conocieron, tuvieron algo semejante a una luna de miel mientras se perdían en los parajes más turísticos del país y en esas duraron algo así como un mes. Hasta ahí todo bien, cada cual regresó a su realidad, no sin antes conocer la realidad del otro. Después de ello casi que empezaron a hablar de un futuro juntos: El viajaría a Estados Unidos a vivir con ella y con sus tres hijos, serían una feliz nueva familia y Colorín Colorado… Pero como era de esperarse, no fue así; al cabo de un tiempo las hormonas de Wilson no se pudieron quedar quietas, pero antes de embarrarla, prefirió cortar las cosas en sano.

Marcos también me lo había advertido, a su manera. Lleva algo más de tres años en una relación, y durante ese tiempo me ha repetido en múltiples ocasiones que no sería capaz de perdonarle los cachos a su novia. Sin embargo, cuando le pregunté que si los cachos fueran virtuales, su respuesta me sorprendió:

-          Serían como cachos de a mentiritas, total si nunca ha existido contacto físico, para que estresarse?

Advertencias venían de todos lados, pero yo nunca quise hacer caso. Podría venderme al mejor postor porque necesitaba sexo de manera urgente y por qué no? Un poco de amor no me vendría mal; el problema es que para disfrutar de todos esos privilegios necesitaba estar “a la venta”, pero dada mi condición de enclosetado no podía mostrar mi mercancía por temor a represalias. Ni modo! Tendría que trabajar de manera clandestina y que mejor hacerlo que usando el bajo perfil que ofrecen las redes sociales hoy en día.

En un principio tuve éxito porque no involucré sentimientos, solo era cuestión de encontrar alguien lo suficientemente atractivo como para iniciar una conversación, de ahí a un coqueteo discimulado, viaje a Bogotá, cita en un café, restaurante o bar, besos, sexo telefónico, luego sexo en vivo, y si gustó pues se reitera la invitación y estuvo; Pero el problema de esa rutina radica en que uno se termina convirtiendo en un pedazo de carne y convierte a otro en pedazo de carne también.

Decidí desnudar mi identidad un poco, con la meta de parecer más real y más confiable, y así ganarme la confianza de alguien y mostrar mi verdadero yo, para darle a oportunidad a ese otro que me quisiera por lo que soy. No iba a ser fácil, no encontraba a nadie en mi ciudad que me pareciera material de novio y en Bogotá los prospectos se desanimaban al saber que yo no vivía allá.

En fin, entonces me sucedió que inicié una relación en dos ocasiones, con un lapso de tiempo de dos meses entre la una y la otra, ambas fueron con colombianos que vivían o estudiaban temporalmente fuera del país. En ambas las cosas iniciaron con una conversación casual, intercambio de pensamientos y gustos, y en cuestión de meses (incluso de días) nacía una química mutua que en ambos casos me hicieron ver juegos pirotécnicos (con uno prácticamente éramos novios, el otro me llegó a proponer que me viniera a estudiar donde él estudiaba). Pero ya sabemos cómo termina la historia, chico conoció chico y chico no era lo que chico esperaba. El romance se quedó plasmado en interminables líneas de texto, pero a la hora de llevar los sentimientos a la mesa de negociaciones, el miedo, y quizá el orgullo, hizo que todo se fuera al caño y que las palabras se quedaran atrapadas en una garganta estreñida.

Ya se imaginarán la decepción tan tremenda, incluso el golpe al ego que uno recibe. A ratos me pregunté si el problema era yo, si me veían tan horrible (Que es totalmente injusto, o sea, tampoco soy modelo de Calvin Klein, pero tengo una que otra gracia, por Dios!). A la larga era culpa de los dos, por acelerarnos y dar sentimientos por hecho.

Ahora, no estoy generalizando ni estoy diciendo que es lo que les va a suceder si se meten en una relación virtual! Yo estoy seguro que debe haber alguna relación exitosa que empezó via internet y que por cuestiones de distancia se puede mantener así (al menos por unos meses); pero desde mi perspectiva personal, es enamorarse de una computadora a distancia! Simple y sencillo. A ver cómo le hace para tener sexo con la computadora, porque el cybersexo al fin y al cabo es un pajazo y ya, puede bajarse una porno o cerrar la pantalla de su portátil y a la larga es lo mismo, cuestión de imaginación… Y si lo virtual sigue siento virtual al fin y al cabo, donde queda la realidad en todo eso?

O bien podría comprarle un vibrador a su traga twittera, le dice “Cada vez que juegues con el, piensa que soy yo”, ahora quien le dice que en vez de imaginárselo a usted, se imagina a Javier Bardem?

Señores, la química es necesaria en toda relación, es el motorcito de ese carro que usted compró con su pareja cuando dijo “Si, quiero estar contigo”; Y la física, asi nos duela, también es necesaria, somos seres sensoriales, y necesitamos conectar todos nuestros sentidos para experimentar emociones plenas. 

La informática es simplemente un medio de comunicación, no es más, abusar de ella es como enamorarse del mariachi en vez del tipo que paga por la serenata.

Si la cuestión es miedo a que no lo acepten como es, recuerde que todos tenemos el mismo miedo, pero es algo que hay que enfrentar y descubrir. Entienda que asi sea usted el man más feo del mundo, siempre va a haber alguien  (así no lo encuentre fácilmente) que lo acepte por el hecho de ser único e irrepetible.

abril 13, 2011

He decidido que me voy a sentar y te voy a esperar... solo por un rato.



Hola!

Ya han pasado más de dos meses sin que crucemos palabra.

Quería saber si aún recuerdas el edificio en obra gris del que hablábamos en nuestras charlas. Lamentablemente ya no es más una obra gris, ahora tiene paredes que tapan toda la vista a la ciudad y al agreste bosque de pinos que lo rodea.

Siendo ese el caso, me temo que  ya no podremos hacer el picnic nocturno con almojábanas y aguadepanela que planeábamos hacer en el último piso de la construcción. Es una lástima que ya nuestros labios no estén repletos de harina.

Pero aún nos quedan muchos escenarios, como aquel que me pintabas la primera noche, recuerdas? Donde querías que te agarrara la mano mientras caminábamos juntos a casa durante una madrugada bonaerense. Yo todavía tengo ganas de llevarte a casa y tomarte de la mano, para cuidar de ti como a un niño pequeño que se le lleva por primera vez a un kínder.

Y que de aquel donde te pedí que me rescataras? Dijiste que vendrías a en tu armadura plateada para rescatar a tu caballero, quien permanecía solo y secuestrado a su suerte… Dijiste que vendrías corriendo, que me raptarías en medio de la noche, nuevamente me agarrarías la mano y correríamos tan rápido hasta que estuviéramos lo suficientemente lejos de todo y de todos, y que ahí… justó ahí, dejarías que mis manos acariciaran tu cara y finalmente caeríamos sobre las hojas caídas del bosque donde nos fundiríamos en un beso sin preocuparnos a qué hora terminara.

Recuerdas cuando te prometí que te mantendría entre mis manos para escudarte de la tormenta, y que sería tremendo idiota donde te dejara ir? Pues… me he convertido en ese tremendo idiota, creo que eso no es nuevo. Tienes que entender que lo hice por mi bien, quizá por el de ambos.

Pero no ha pasado ni un solo día en el que deje de preguntarme cómo estás, si estás bien, si estás vivo.
Ahora sé que estás en casa, solo por un corto tiempo. No te niego que me muero de ganas por llamarte y quizá inventarme un motivo para escaparme e ir a verte. Sin embargo, te he pedido que me des una señal, pero creo que por ahora has decidido mantenerme en sala de espera. No sé si lo que hice te causó tanto dolor que te convirtió en hierro o si simplemente lo que pasó fue tan insignificante que aún no te explicas como es que yo ande en espera por ti.

Ojalá puedas leer esto, si es que andas por ahí… y me puedas responder.  Solo dime que sí y correré a verte en el menor tiempo posible.

Te extraño.
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Si saben que mi historia está concursando en #1añitohombreconhombre ? Tomense el trabajito de leer la entrada en http://hombre-con-hombre.blogspot.com/2011/04/de-la-primera-vez-y-otros-fiascos.html y si les gusta VOTEN! y si no, pues comenten al menos. Es un ejercicio literario bastante bueno y de paso leen otras entradas que seguro les van a gustar, se van a sentir identificados. Abrazos a todos!