enero 18, 2011

Confieso que soy un cyberguenza

Mi primera vez fue a los 21 años...



En ese año mi papá se decidió a instalar internet en la casa. Hasta ese entonces, era una herramienta que utilizaba en los cybercafes o en la universidad, para fines puramente académicos (ahem!) y ligeramente ociosos, Pero cuando llegó a casa esa caja de Pandora, adapté esos servicios deacuerdo a como la privacidad de mi hogar me lo permitía.

Decidí abrir una cuenta en un conocido portal de internet, y mas tarde descargar un messenger propio, que en un principio me permitió interactuar con personas en países que  nunca habría imaginado; pero con el tiempo me aburrí y supe que era el momento de buscar cosas interesantes, y que era lo que necesitaba en ese momento? (Si su respuesta fue sexo... que come que adivina?) Pero bueno, en ese momento lo necesitabaen dosis medidas, no quería nada que me obligara a interactuar mas alla que con unas simples frases amistosas y ya, solo necesitaba conocer gente como yo, no quería un romance ni nada por ese estilo.

Todo funcionaba relativamente como yo necesitaba, como no tenia una webcam pues nadie me pedía hacer acrobacias y yo no tenía intención alguna de hacerlas, vivía tan paranoico de que alguien del servicio proveedor de internet pudiera espiar todo lo que yo hiciera por red que en algun momento llegaría algún operario para sobornarme (hey, no me juzguen por ello, todos los enclosetados manejamos un cierto grado de paranoia, o no?).

Cierto día accedí a que alguien me mostrara su cam, yo en mi inocencia pensé que solo quería saludar y ciertamente así lo hizo, solo que el saludo venía de su entrepierna. Al principio me ruboricé y me sentí "sucio", pero al cabo de unos minutos mi morbo fue mas fuerte que mis principios y quise ver como se masturbaba. Tengo que aceptar que me sedujo el tamaño de su miembro, asi como la ausencia de vello púbico y un abdomen envidiable.

Tenía ganas de más, sin que eso implicara que yo tuviera que poner de mi parte, ataqué las páginas de porno gay visiblemente mas decentes, aquellas que no tuvieran spam (jure papito!!) o al menos no de esas que abren ventanitas publicitarias de contenido nada prudente y que se abren en montonera... en fin, un día encontré un grupo en otro famoso portal, que estaba en frances, pero que publicaba fotos de europeos mediterraneos carnuditos, peluditos desplegando cuanta area prohibida de su cuerpo habia. En fin, esa página deleitaba mis ojos y mis fantasías, tan virgenes y necesitados en ese entonces.

Pero a los dias siguientes entraba en choque espiritual, generalmente los domingos, en las reuniones familiares mientras mi mamá hablaba de lo juicioso que era su hijo y mientras las tias y primas me miraban con ojitos de "ayy tan lindo!!" mi conciencia me escupía "sucio! sucio! cochino! ... si supieran estas viejas donde puso las manos este angelito la noche anterior...". Al cabo de un tiempo entre la u, la paranoia, el porno inaccesible y la repetición de contenidos, decidí que no más europeos carnuditos por un buen tiempo.

Así pasaron cuatro años, en los que los contenidos de medianoche de Film Zone, Cinemax y la estática de Venus me permitían ocasionalmente apaciguar mis noches de soledad. Me conformaba con los contenidos softcore que me permitian apreciar a uno que otro actor de generosas carnes mover sus nalgas al son del mambo horizontal. Finalmente recibí un regalo invaluable: un portátil, un router inalámbrico, y con ellos las ventajas que ofrecía el ancho de banda de ese entonces: YouTube, Ares, Megaupload, Rapidshare, ...

Para ese entonces ya tenia poco mas de 25 años, y un par de viajes al exterior que me habian permitido abrir mi mente, que me quedaba por hacer? Explorar mi sexualidad sin recato alguno. Empecé a descargar cuanto contenido recomendaban en cualquier blog de temática gay, así fue que conocí a los YouTubes de alto contenido, y los enlaces para descargar películas a pedacitos. Puedo decir en este momento que tengo en mi haber un par de DVDs repletos de machos dándose amor entre si, pero discimulados como copias de seguridad de bibliografia académica (solas clases de anatomía), a los que en su momento disfruté pero que hoy en dia utilizo como último recurso.

La pornografía se tornó fría después de un tiempo, necesitaba explorar algo que me permitiera interactuar y así obtener mayor satisfacción corporal... que podría ser?

Que tal si descansamos, mi buen lector? El resto lo dejamos para la segunda parte, le parece?

3 comentarios:

  1. Uno siempre tiene cierto gusto por la pornografía y mas en nuestro caso y mas aún cuando se nace y crece en un lugar pequeño; siempre se tienen dudas, uno se pregunta como será? como será aquel fisicamente, como se desarrolla su cuerpo y entonces, en la juventud las hormonas andan de fiesta y uno busca la manera de saciar todo eso ya que por una u otra circunstancia uno no puede con sus pares, entonces aparecen en la mugrosa parrilla perubólica las fatales películas de Emanuelle en donde uno ve un desfile de tetas a diestra y siniestra pero ellos no piensan en los fogosos adolescentes gay que quieren ver aunque sea un hombre en boxer. Y todos los canales eran por el mismo estilo; el internet (en mis tiempos) no tenia mucha fuerza asi que los primeros 10 minutos de fotografias de machitos desnudos eran alentadores, uno esperaba ver mas que impresos, uno queria el mundo en movimiento y para cuando eso llegó de la mano de.... en fin, a esas alturas, en los haberes la memoria ya no sirve.
    Y si, uno se cansa, se cansa de ver en la pantalla, pero tambien se cansa en la vida real, porque cuando uno comprende la diferencia entre tener sexo y hacer el amor, esta ultima te marca la existencia para siempre; tirar por tirar es delicioso, hace parte del conocimiento, de tu propio enriquecimiento, es ahí donde aprendes a diferenciar lo bueno de lo malo, la razón de la locura y solo asi entiendes que te gusta y que no. Pero como todo es un proceso pués llega el momento de salir de la web para pasar a la vida real ahi te encuentras con los dos mundos, ese que no tiene limites y que te permite llegar hasta donde quieres, sin ley y sin sombra; por otro lado está el mundo de una sola persona, esa que te desarma y te arma la vida con tan solo una mirada, esa que te hace sentir mas vivo que cientos de almas.

    Saludos

    Pdata: que horror de comment, pero prometo limitarme de aqui en adelante

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  2. Jajajaja donde está el horror que no lo veo? Por favor no te limites en los comentarios, para mi como blogger asi como para los que entran a mi blog es importante tu opinión, por favor no te abstengas, todo es retroalimentación. Aprecio que sigas mi blog :D

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  3. Me sentí identificado, tu relato me hizo recordar la maldita factura de ETB que venía con todos los lugares que se habían visitado en internet, decantados, uno a uno y con el tiempo contabilizado de conexión. Afortunadamente la fecha y la hora siempre salían mal y podía atribuírselos a cualquiera que no fuera yo, porque estaba en el colegio.
    Me gusta mucho la manera en que escribes. No dan ganas de detenerse y ya sólo con comenzar uno siente la necesidad de seguir.

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